Empoderarse a través de superar situaciones adversas, no cabe duda que nos fortalece en cuerpo y alma, en satisfacción personal y encontrar cada vez más cercanos los objetivos propuestos (siempre recomiendo que sean palpables y cercanos, otro camino diferente nos llevaría a crearnos dudas y desánimo).
Qué duda cabe que dependerá cómo afrontemos cada situación, actitud, determinación, creencia, etc. etc. ¿Pero esto es infalible?
Por experiencia puedo testimoniar que no. Muchas veces nos encontramos que poniendo mucho o todo de nuestra parte podrán aparecer resiliencias negativas, debilidades, experiencias y otra serie de variables que podrían frenar nuestro crecimiento en consonancia con nuestro objetivo y en nosotros como profesionales del COACHING estará el anticiparnos en el acompañamiento para que inclusive estos retrocesos que se pueden dar afecten lo menos posible a nuestro COACHEE.
Manteniéndolo alerta a través de lo conseguido, recordandole la experiencia de su andadura, sus progresos y sobre todo con el deseo de su objetivo estará dentro de las diversas variables que se nos den y los recursos obtenidos para superarlas. En una palabra EMPODERANDOLO a través de lo ya conseguido.
Hoy en mi publicación quiero poner como ejemplo al futbolista Alex Gil, jugador del C.D.A. Navalcarnero.
En el mundo del deporte hay decisiones que a veces no están alineadas ni con la trayectoria, ni con la realidad del momento, pero como tales hay que respetarlas, porque cada decisión tiene su momento y esto se da día a día en el deporte.
Alex tuvo que salir de su club de toda la vida con 19 años, después de toda una década allí, cambio de ciudad, de club, de vida, para seguir con su sueño, tuvo que superar aclimatación en su nuevo club cuando metódicamente era perfecto antaño, tuvo que superar el cambiar su cuarto por otro donde su compañero involuntariamente le transmitió una enfermedad, tuvo que hacer frente a una alimentación distinta, lesiones físicas, debilidad personal respecto a sus capacidades… nos sobrepusimos empezando un trabajo duro y recto, comprometido, había que superar todas esas adversidades para empezar a crecer en nuestro nuevo club.
Empezó la nueva temporada la cual con mucho trabajo conseguimos acabarla muy bien tanto en lo físico como en lo psíquico, Alex sabía que tenía que salvar todas esas resiliencias negativas, que eso iba a ser fundamental.
Dio su paso al C.D.A. Navalcarnero, y se puso en marcha, y superamos barreras, y creímos y fue nominado 5 veces para el mejor jugador en su posición.
Y superamos, cambiamos, salimos de las presuntas zonas de confort, focalizamos en su nuevo destino, superando lesiones, decisiones técnicas, asumiendo su ROL, todo esto solo se consigue QUERIENDO.
Resultado., ofertas de otros clubs y por supuesto su preferencia que era renovar por el club que confía en él.
Alex es un ejemplo de superación en grado sumo.
Apoyado por Pedro y Sonia ha sabido entender que superando barreras el ARTE lo traía de serie.
Pedro J Quesada